miércoles, 2 de marzo de 2011

También tienen derecho a soñar

La Sociedad de Ambientadores y Personas Elegantes (SAPE), creada en el Congo en el año 1920, es una de las caras menos conocidas  de África: la elegancia como religión, el culto a la imagen y a la apariencia unido a todo un código de conducta, es decir  la elegancia nunca se improvisa. Todo tiene un significado, desde la marca al color de la ropa. Pero también es muy importante el modo de comportarse, de andar,
de bailar y de moverse: todo tiene que ser
propio de caballeros.












En esta sociedad, lo que se puede apreciar es  el rechazo  que les produce que por el simple hecho de haber nacido pobres, en el Congo, tengan que resignarse a vivir  en la pobreza toda la vida, y peor aún, que todas aquellas sociedades ricas y avanzadas, al pensar en el Congo lo primero en que piensen sea en la pobreza, y es por esto, por lo que estas personas intentan crearse  una imagen de prosperidad y éxito, que muy posiblemente no tengan, y aunque apenas tengan para comer, ellos se comprarán sus ropas elegantes, ya que posiblemente esa sea su única forma de poder reivindicarse sobre su derecho a luchar y decidir su propio destino,  y todo esto, es lo que la SAPE le puede ofrecer a los congoleños, tener derecho a soñar.

Aunque de lo que no cabe duda, es que por muy buena que sea su intención y las  ganas de superación de esta organizacíón, en el congo existe muchisima pobreza, y quizás este movmiemiento, pueda hacernos ver, que mientras en  nuestro "mundo rico" los llamados modernos dejan este tipo de elegancia, por otra que busca el desaliño, y lo informal, en el Congo hay un grupo de personas comportandose como auténticos y elegantes caballeros  que igual tan solo quieren llamar la atención, pero en mi opinión, lo único que quieren son unas pocas mas de oportunidades para su pueblo.






Carmen López

No hay comentarios:

Publicar un comentario